La histórica carrera Jean Bouin, una de las primeras carreras por asfalto y ciudad de Europa, llegaba a la edición número noventa. Para celebrarlo más de 17.000 atletas se calzaron sus zapatillas para participar en alguna de las diferentes carreras que componen esta histórica prueba.
La carrera Open 5K fue la más madrugadora y a las 8:30 h se dio el pistoletazo de salida. El atleta catalán José Luis Blanco, plata en los 3.000 obstáculos de los europeos de Göteborg de 2006, venció con un tiempo de 15:04 minutos. En categoría femenina, la vencedora fue la exatleta profesional Elisa Elilli con un tiempo de 19:00 minutos. Esta disciplina era la novedad de la presente edición con final en el Arc del Triomf.
La carrera Open 10K, con el tradicional final en la avenida Maria Cristina frente a la Font Màgica de Montjuïc, se inició a las nueve de la mañana. David Martínez fue el ganador tras correr toda la carrera con su compañero de entrenamiento y amigo Just Sociats –ganador en la edición anterior– al que dejó atrás a pocos metros de meta. Paró el cronometro en 30:47 minutos tan sólo 6 segundos antes que Just. En categoría femenina, la vencedora fue Sandra Asín con una marca de 37:01 minutos, por delante de Montse Carazo (37:40′).
En la categoría de silla de ruedas, sobre la distancia de 4.650 metros, la victoria ha sido para el atleta paralímpico y plusmarquista mundial de los 800 metros Roger Puigbó, que ha logrado su decimoquinta victoria en la prueba con un tiempo de 12:16.
Después de celebrarse las carreras en diferentes categorías federadas y escolares se inicio la competición profesional con 62 corredores. El atleta José Luis Blanco, que había ganado la prueba de los 5 kilómetros, también fue de la partida pero acusó el esfuerzo realizado y no pudo luchar por la victoria final. El corredor ugandés Soyekwo Kibet, campeón de su país de los 10.000 metros (28:13) en 2013, se adjudicó la carrera con una marca de 29:48 minutos. El también ugandés Dickson Huru y el atleta marroquí Ilias Fifa (FC Barcelona) fueron segundo y tercero, respectivamente. Era la primera vez que participaban atletas de este país africano. Su compatriota Rebecca Cheptegei, con un registro de 22:12 minutos, también subió al cajón más alto de podio. Ambos atletas acusaron los casi 3 kilómetros de subida finales.
El punto de vista amateur
Quinta carrera incluida en la Lliga Corrent fem Barça en la que esta vez, mis compañeros de Am14, me dejaron sólo.
La carrera es muy bonita. Transcurre principalmente por calles anchas de Barcelona –Gran Vía, paseo Colom y Paral·lel– donde se evitan aglomeraciones. La coincidencia de una prueba de 5 kilómetros, con meta a mitad de recorrido, con la de 10 es un pequeño problema porque la gente se cruza en busca de su carril en la recta del Arc del Triomf.
El viraje de 90º del paseo Pujades es infernal, ya nos encontramos con él en sentido contrario durante la carrera de La Mercè y volvió a ser un problema durante la Jean Bouin con los pertinentes pisotones y aglomeración.
Por mi parte, después de unos meses preparando las dos medias maratones (Mediterrani y Behobia-San Sebastián), la carrera me llegaba en un momento de recuperación y casi sin entrenamiento. Los casi tres kilómetros de subida finales me impidieron hacer una mejor marca (49:06) pero aún así estoy muy contento con la décima posición en la categoría de 35-45 años de la Lliga Corrent fem Barça.
Las quejas principales de los participantes se debían a su precio abusivo, convirtiendo la carrera en el kilómetro más caro de Barcelona. También hay que mejorar la distribución de los cajones, puesto que habían muchos dorsales lentos colados en los cajones rápidos con la pertinente molestia a los corredores que se pasan los primeros kilómetros adelantando corredores. Personalmente adelanté casi 1.000 posiciones en carrera, cosa que normalmente no me pasa.
