¿En realidad sería tan importante la presencia de Leo Messi en el Bernabeu? Viendo cómo la pareja Neymar + Luis Suárez -autores de los 17 goles marcados en la Liga por el Barça desde la lesión de Messi- ha gestionado la baja del argentino y el momento de juego del equipo, resulta evidente que el Barcelona ha superado el síndrome de abstinencia que durante muchos años le había generado la ausencia del mejor jugador del Mundo. ¿Alguien se acuerda ahora de la Messidependencia? Y es que el Barça no tiene únicamente en sus filas al número uno, en la actualidad su ataque está formado por el número 2 y el número 3 mundial y así todo es más sencillo de afrontar.
Pero no solo vive el equipo de Luis Enrique del estado de gracia de los dos delanteros, sino de Sergio Busquets, que está en el mejor momento de su carrera, de un prometedor Sergi Roberto, que es sin duda la mejor noticia de la temporada, y de Andrés Iniesta, que ha vuelto después de la lesión en un gran momento de juego. El Barça ha acabado con goles el debate, ha respondido con victorias a las dudas sobre su juego y se ha sobrepuesto a una situación complicada incluso mejorando sus prestaciones defensivas, la peor línea del equipo en el inicio de temporada.
El estado físico actual de Messi es una incógnita. Muy pronto, demasiado, algún medio se aventuró en anunciar a toda portada su baja para el Bernabeu, pero no está nada clara. Desde el club, el hermetismo es total. Leo sigue completando las sesiones de recuperación, continua con sus protocolos médicos y se muere de ganas de volver, pero no tiene que tener prisa. La temporada es larga, los retos máximos y la posibilidad de una recaída, real.
El médico de la selección argentina, Homero de Agostino, considera que es «bastante difícil» que Messi juegue en el Bernabeu. «El riesgo de recaída si Messi juega el Clásico es elevado«, ha dicho el doctor de la AFA, quien pide paciencia: «El técnico no puede confiar en un jugador recién recuperado». Cuenta de Agostino que la lesión de Messi se puede reproducir cuando «el jugador le dé con la cara interna del pie«, pero todo el mundo sabe que al final quien decidirá será Messi y sus enormes ganas de volver a jugar.
Luis Enrique ha dado algunas pistas sobre el estado del argentino y ha realizado un par de probaturas con un nuevo sistema resultón. Un 4-4-2 con Iniesta jugando de enganche con los dos delanteros. Ese dibujo lo probó unos minutos ante el Getafe y 20 más ante el BATE Borisov, justo hasta que se lesionó Ivan Rakitic. La baja del croata en Madrid -una rotura en el sóleo sin que se conozca el periodo de baja- generaría un problema inesperado para el técnico asturiano, quien confiaba en el croata para jugar en uno de los vértices del rombo en el centro del campo, fortalecer la medular y acabar con las dudas del tercer delantero, ya que si Neymar y Suárez han estado a un grandísimo nivel, las prestaciones de Munir y Sandro han estado por debajo de lo esperado.
La derrota del Real Madrid en Sevilla y el hecho de que el Barça llegue al Bernabeu líder en solitario y con tres puntos de diferencia ha cambiado el escenario. Si el Barça se presenta y gana en Madrid sin Messi, la estocada sería monumental por lo inesperado y los azulgrana tendrían todo el tiempo del mundo para ir reconstruyendo su equipo. Paso a paso, el equipo que ganó el triplete empezó a consolidarse en enero y después de una derrota en Anoeta. Igual los éxitos de este curso se cimentan sobre un triunfo, en el Bernabeu y el 21 de noviembre.