Al mismo tiempo que el Real Madrid comenzaba su encuentro ante el Athletic de Bilbao (3-1 final), la plantilla del FC Barcelona se apeaba del autobús en Valencia y quedaba concentrada para la disputa de esta noche de su tercer partido liguero en Mestalla.
El duelo viene precedido de extrañas sensaciones por parte de ambos conjuntos. Los chés regresaron perplejos de Cornellá hace unos días y según su entrenador Djukic ya están escarmentados ante las desconexiones cerebrales que sufre el equipo en algunos partidos. Mientras tanto, un Barça que con los números en la mano ha tenido un gran comienzo de temporada (Supercopa y 2 de 2 en Liga con 8/0 en goles) ha cambiado por el momento los porcentajes de la mezcla jogo bonito/oficio para ganar.
Por parte local, hoy reaparece tras su enésima lesión de larga duración el cántabro Canales, que tratará de fijar a Dani Alves en tareas defensivas con su talento cerca del área. Misión del brasileño será conseguir que no conecte el chaval con Postiga. Por la otra banda, la presencia eléctrica de Feghouli pone a Martino en un brete. ¿Alba o Adriano? El joven canterano conoce a algunos de los rivales de hoy de primera mano, si bien es cierto que Adriano parece estar aportando más y mejor en este inicio de curso, tanto en defensa como en ataque. El físico del brasileño tomará la decisión final.
Por el centro pero cayendo también a esa banda veremos a un Banega que cuenta con el visto bueno de los médicos, pero al que se vio entrenando ayer con un vendaje en su aún maltrecha rodilla. Si el Barça consigue mover con velocidad la pelota en el centro del campo, el paso de los minutos se le podría hacer eterno al argentino del Valencia.
Los azulgrana, sin Xavi ni Alexis por decisión técnica, se enfrentarán a una posible defensa con laterales muy ofensivos (Guardado y Pereira) a los que habrá que fijar utilizando a Neymar y Pedro (o Tello) como puñales junto a la cal. Las posibles ayudas de los centrales Rami y Costa podrían abrir huecos para que Messi, Cesc e Iniesta campen a sus anchas cerca del área. Todo dependerá, como casi siempre, de la velocidad de juego del Barça. Si el partido se convierte en una pachanga de balonmano, el Valencia le hará daño los culés. Si se recupera la velocidad que hace meses que no se ve, los de Martino recuperarán el liderato que esta mañana alcanzó el Real Madrid. En cualquier caso, partidazo en Mestalla.