El alpinista suizo Ueli Steck, conocido como la máquina suiza, volvió a batir el récord de ascenso de velocidad a la cara Norte del Eiger el pasado 16 de noviembre. 2 horas, 22 minutos y 50 segundos le bastaron al suizo para llegar a la cima del Eiger y recuperar así el récord que le había arrebatado hacía unos meses su compatriota Daniel Arnold.
Steck usó la vía Heckmair que lleva el nombre del líder de la expedición austro-alemana que conquistó por primera vez la norte del Eiger en 1938. La misma vía que el pasado 20 de abril utilizó Arnold para conquistar la cima en 2 horas y 28 minutos y rebajar en 20 minutos el récord que poseía el propio Steck desde el 4 de febrero de 2008 (2 horas, 47 minutos y 33 segundos).
El Eiger es un pico de 3.970 metros de altura, ubicado en los Alpes, en la parte más oriental del macizo del Jungfrau. Comparte protagonismo con otros dos picos: el Mönch (4.099 metros) y la Jungfrau (4.158 metros). Pese a ser el de menor altura, el Eiger destaca por una impresionante pared de más de un kilómetro y medio en vertical, lo que le convierte en un imán para escaladores de todo el mundo.
El alpinista suizo se ha pasado tres semanas en el Eiger y ha completado tres acensiones al pico. La primera, el pasado 8 de noviembre, acompañado de Kilian Jornet en la que supuso la primera ascensión para el deportista catalán, en 6 horas y 24 minutos. Tres días más tarde, Steck repetía ascensión con su compatriota Nicolas Hojac en 3 horas y 46 minutos.
«He pasado unos días fantásticos en la norte del Eiger. Gracias a Kilian, Nicolas y Daniel por inspirarme y motivarme», explicaba satisfecho Steck tras recuperar el récord de una de las más emblemáticas cimas de los Alpes berneses de Suiza.