Entrevista a Vitaly Shkel

Vitaly Shkel, tres veces campeón ruso de skyrunning y miembro del equipo nacional, acaba de conseguir dos récords este verano en otras tantas de las montañas más altas de Rusia: el pico Lenin (7.165 m) y el Monte Elbrus (5.642 m).

Hace un año acompañó al atleta catalán Kilian Jornet en uno de sus proyectos recogidos en Summits of my life. Tras correr una carrera en el Elbrus decidieron intentar batir juntos el récord de ascenso y descenso del techo del continente europeo. La aparición del corpulento corredor ruso con una tirita en la nariz en la película de Seb Montaz “Déjame vivir” puso en el mapa a Shkel al que todos le apodaban el monstruo. Pero, ¿quién es realmente Vitaly Shkel?


¿Se considera más corredor de montaña que alpinista?

Soy un corredor. Pero a veces debo ser un auténtico montañero.

La primera vez que Kilian Jornet y Seb Montaz le vieron no pudieron evitar recordar al boxeador ruso Ivan Drago de la película Rocky IV. ¿Realmente se ha ganado esa fama de duro?

No entiendo muy bien qué es ser un hombre duro. Sí, soy una persona exigente pero solo en lo que se refiere a mí mismo. A veces puedo parecer serio o grosero de puertas a fuera, sin embargo los que de verdad me conocen más de cerca creen que no soy así realmente. Soy un hombre sencillo, con deseos simples y debilidades.

¿Dicen que se pasó un verano entero en una choza en forma de barril por encima de los 4.000 metros de altitud para preparar la carrera?

Vivo en la ciudad de Terskol, en la región del Elbrus, a 2.200 metros de altitud. Sí, algunas veces duermo sobre 3.700 o 3.850 metros gracias a mis amigos. De hecho, Elbrus es uno de los pocos lugares del mundo donde se puede preparar una carrera a gran altitud durante todo el año. Estuve viviendo por encima de 4.400 metros de altitud durante tres semanas. Fue en julio, justo antes de la Lenin Race. El Monte Elbrus no necesita una aclimatación tan completa. No regresé al Elbrus justo después del pico Lenin, así que no puedo asegurar si he usado la aclimatación plenamente. Debo decir que una aclimatación de estas características tiene sus pros y sus contras. Puedes ganar mucho funcionalmente, pero a la vez puedes perder física y mentalmente debido a la altitud y las condiciones de vida que fueron geniales en el pico Lenin gracias a la empresa Aksai-Travel. Uno se cansa de la falta de comodidad diaria, así como del frío, la nieve y el hielo. Creo que quién haya pasado mucho tiempo en la montaña entenderá que quiero decir.

¿Qué falló en la tentativa del récord del Monte Elbrus con el corredor catalán?

En las imágenes se ve como Jornet intenta seguir pero a los pocos metros da marcha atrás muerto de frío. Se debió al clima. Al fuerte viento y al frío, ¡sin duda! En aquellas condiciones se nos hubiesen congelado las extremidades. Mientras compites es fácil que no prestes atención al hecho de que no sientes las manos o las piernas y de repente te das cuenta de ello. Cosas así me han sucedido a mí. Por lo tanto, creo que la decisión de los jueces de detener la carrera era la correcta. Ellos lo sabían mejor que nosotros. Yo no hubiese parado por mí mismo, y Kilian, tampoco.

En aquella ocasión el récord no se consiguió incluso no se llegó a la cima. ¿Se prometieron volver a intentarlo juntos?
Definitivamente me gustaría volver a tener la oportunidad de competir con Kilian otra vez. Competir contra un rival así de fuerte te hace llegar hasta el límite. Además, este tipo de competencia es buena para la comunidad deportiva.

[…] Seguir leyendo. Esta entrevista a Vitaly Shkel la realicé para los compañeros de Sportvicious. Podéis encontrar la versión completa en el número 15 de su revista digital.

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